Mi Madre, tanto que agradecerle y, sin embargo, siempre criticándola.
Madre querida, quiero transmitirte que es mucho lo que he recibido de ti, mucho más de lo que con frecuencia veo y reconozco. Quiero partir reflejándote algunas de las muchas virtudes que reconozco en ti, que han sido un ejemplo esencial en mi vida.
Tu valentía. Mi recuerdo, desde muy niño, me muestra una madre siempre lista y atenta a enfrentar cualquier desafío y adversidad, casi sin pensarlo, actuando frente a la amenaza, en problemas económicos, en la enfermedad, en la necesidad de otros, nunca un no puedo, siempre una reacción espontánea de acción para tratar de resolver, de apoyar, de ayudar…..gracias.
Tu nobleza. Siempre hablando de los altos valores de tu marido, de la familia Izquierdo, sin darte cuenta que tú has sido muy noble a lo largo de tu vida. Noble porque has estado siempre atenta a ayudar al caído, porque no recuerdo en ti el buscar bajar a los demás, el hablar mal de otros. Noble porque no estás atenta a tus muchas virtudes, no sacas cuentas de todo lo que has hecho y sigues haciendo por los demás….gracias.
Tu energía inagotable. Siempre tirando para arriba, levantándote rápido de cualquier caída, buscando resolver, no dejándote derrotar frente a la adversidad. El recuerdo de la medre de siete hijos que, con habilidad, se las arreglaba para resolver uno y mil desafíos, cada día, no sólo como madre, también como esposa, haciéndote cargo de temas que, normalmente en cualquier familia, resolvía el hombre, el marido, el padre. Estabas preocupada que la casa estuviera siempre abastecida, que comiéramos bien, que recibiéramos a los invitados del papá como reyes….pero además trabajabas, hacías traducciones, turnos en la liebre, vendías enciclopedias, te encargabas de las negociaciones, desde vender el auto o la casa, hasta negociar la línea de crédito con el banco. Sí, eras tú la que lidiabas con toda la incertidumbre económica, eras tú la que no permitía que cayéramos en los miedos o la desesperanza, la que con energía y arrojo sacabas a delante muchos proyectos…..gracias.
Tu sencillez. Sí, a pesar de ser bonita, elegante, de tener mucho de que enorgullecerse, de tantos y tantos logros, nunca miraste desde arriba a nadie, fuiste siempre capaz de compartir con todos los que te rodeaban en forma auténtica y sencilla. Con gente pobre, con gente rica, con intelectuales, artistas o pitucos y siúticos, y, a diferencia de muchos que por temor tienden a descalificar a los demás, no te recuerdo hablando mal de otros…..gracias. Por tu sabiduría y sensatez. Sí, no eres intelectual, pero sí muy centrada, puedes reconocer a la distancia lo que es bueno y lo que es malo, ya sea para un hijo tuyo como para el país. No te “dejas llevar” por la moda, por la brillantes intelectual de algunos, o los proyectos refundacionales y utópicos de otros. Desde que tengo recuerdo me has mostrado el mundo con una mirada sensata….gracias.
Por tu capacidad de compromiso y generosidad. Tanto en causas sociales, políticas y religiosas, tengo la sensación de que siempre has estado atenta en aportar donde se te necesita, asumes compromisos y perseveras en el tiempo, cosa que hoy escasea en el mundo. Me has mostrado lo importante que es estar atenta a lo que sucede a los demás, ya sea a alguien de tu familia, o a tu país…..gracias.
Por tu capacidad de asombro y curiosidad. Siempre motivada en muchos temas. Atenta a escuchar, observar, aprender, desde lo espiritual, lo sicológico, la literatura, la escritura, la música la naturaleza. Nunca te aburres, siempre estás reparando en las cosas interesantes que te rodean…..gracias.
Madre, tienes mil virtudes y, sin embargo, no lo notas. Te has pasado la vida “dando examen”, como si tuvieras que reunir méritos para ser aceptada y querida, capaz que nunca lo veas, pero yo te lo puedo decir…has sido y eres una mujer admirable….muchas gracias.
Hoy sin más, es el momento de llamarla. A probar suerte.
De vez en cuando nos comunicamos, son mensajes escuetos que quieren abarcar mucho,que dicen que nos queremos.
Una llamada telefónica y me doy cuenta del por qué. Al otro lado del mundo, es ella con su energía amorosa, rebosante de empatia, de sencillez que me envuelve. Generosa y bondadosa, atenta a la necesidad del otro. Resuma vida que se perpetua a lo largo de los años y me hace feliz.
Con amor Isabel
Hoy, además, me comenta e insta a leer una carta del Padre Silvestre en su blog. Me encuentro con un escrito de reconocimiento y agradecimiento a su persona. Me alegra mucho y me anima. Pocas veces hacemos explícito lo que sentimos.
5 comentarios:
Santiago 4 de agosto de 2020
Mi Madre, tanto que agradecerle y, sin embargo, siempre criticándola.
Madre querida, quiero transmitirte que es mucho lo que he recibido de ti, mucho más de lo que con frecuencia veo y reconozco. Quiero partir reflejándote algunas de las muchas virtudes que reconozco en ti, que han sido un ejemplo esencial en mi vida.
Tu valentía. Mi recuerdo, desde muy niño, me muestra una madre siempre lista y atenta a enfrentar cualquier desafío y adversidad, casi sin pensarlo, actuando frente a la amenaza, en problemas económicos, en la enfermedad, en la necesidad de otros, nunca un no puedo, siempre una reacción espontánea de acción para tratar de resolver, de apoyar, de ayudar…..gracias.
Tu nobleza. Siempre hablando de los altos valores de tu marido, de la familia Izquierdo, sin darte cuenta que tú has sido muy noble a lo largo de tu vida. Noble porque has estado siempre atenta a ayudar al caído, porque no recuerdo en ti el buscar bajar a los demás, el hablar mal de otros. Noble porque no estás atenta a tus muchas virtudes, no sacas cuentas de todo lo que has hecho y sigues haciendo por los demás….gracias.
Tu energía inagotable. Siempre tirando para arriba, levantándote rápido de cualquier caída, buscando resolver, no dejándote derrotar frente a la adversidad. El recuerdo de la medre de siete hijos que, con habilidad, se las arreglaba para resolver uno y mil desafíos, cada día, no sólo como madre, también como esposa, haciéndote cargo de temas que, normalmente en cualquier familia, resolvía el hombre, el marido, el padre. Estabas preocupada que la casa estuviera siempre abastecida, que comiéramos bien, que recibiéramos a los invitados del papá como reyes….pero además trabajabas, hacías traducciones, turnos en la liebre, vendías enciclopedias, te encargabas de las negociaciones, desde vender el auto o la casa, hasta negociar la línea de crédito con el banco. Sí, eras tú la que lidiabas con toda la incertidumbre económica, eras tú la que no permitía que cayéramos en los miedos o la desesperanza, la que con energía y arrojo sacabas a delante muchos proyectos…..gracias.
Tu sencillez. Sí, a pesar de ser bonita, elegante, de tener mucho de que enorgullecerse, de tantos y tantos logros, nunca miraste desde arriba a nadie, fuiste siempre capaz de compartir con todos los que te rodeaban en forma auténtica y sencilla. Con gente pobre, con gente rica, con intelectuales, artistas o pitucos y siúticos, y, a diferencia de muchos que por temor tienden a descalificar a los demás, no te recuerdo hablando mal de otros…..gracias.
Por tu sabiduría y sensatez. Sí, no eres intelectual, pero sí muy centrada, puedes reconocer a la distancia lo que es bueno y lo que es malo, ya sea para un hijo tuyo como para el país. No te “dejas llevar” por la moda, por la brillantes intelectual de algunos, o los proyectos refundacionales y utópicos de otros. Desde que tengo recuerdo me has mostrado el mundo con una mirada sensata….gracias.
Por tu capacidad de compromiso y generosidad. Tanto en causas sociales, políticas y religiosas, tengo la sensación de que siempre has estado atenta en aportar donde se te necesita, asumes compromisos y perseveras en el tiempo, cosa que hoy escasea en el mundo. Me has mostrado lo importante que es estar atenta a lo que sucede a los demás, ya sea a alguien de tu familia, o a tu país…..gracias.
Por tu capacidad de asombro y curiosidad. Siempre motivada en muchos temas. Atenta a escuchar, observar, aprender, desde lo espiritual, lo sicológico, la literatura, la escritura, la música la naturaleza. Nunca te aburres, siempre estás reparando en las cosas interesantes que te rodean…..gracias.
Madre, tienes mil virtudes y, sin embargo, no lo notas. Te has pasado la vida “dando examen”, como si tuvieras que reunir méritos para ser aceptada y querida, capaz que nunca lo veas, pero yo te lo puedo decir…has sido y eres una mujer admirable….muchas gracias.
Te quiero,
Tu querido hijo menor, Tomás
Que
Desde muy lejos y muy cerca
De su ahijada Isabel Margarita
Hoy sin más, es el momento de llamarla. A probar suerte.
De vez en cuando nos comunicamos, son mensajes escuetos que quieren abarcar mucho,que dicen que nos queremos.
Una llamada telefónica y me doy cuenta del por qué. Al otro lado del mundo, es ella con su energía amorosa, rebosante de empatia, de sencillez que me envuelve. Generosa y bondadosa, atenta a la necesidad del otro. Resuma vida que se perpetua a lo largo de los años y me hace feliz.
Con amor Isabel
Hoy, además, me comenta e insta a leer una carta del Padre Silvestre en su blog.
Me encuentro con un escrito de reconocimiento y agradecimiento a su persona.
Me alegra mucho y me anima. Pocas veces hacemos explícito lo que sentimos.
Agosto 2020
Muy. pronto. le. escribo, no. me.
sentía muy bien. T. Mucho que ver. el. encierro de. la. cuarentena
Lo. quiero mucho, me. ha. hecho muy feliz. Su. Madre
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